A 46 se elevó la cifra de fallecidos por la helada profunda de una tormenta invernal mortal que azota gran parte de Estados Unidos y que continuará durante la semana.
Se estima que la cifra de fallecidos puede aumentar después de atrapar a algunos residentes dentro de las casas y dejar sin electricidad a decenas de miles de hogares y negocios.
Medios de comunicación estadounidenses confirmaron que las muertes se registraron en 12 estados: Colorado, Illinois, Kansas, Kentucky, Michigan, Missouri, Nebraska, Nueva York, Ohio, Oklahoma, Tennessee y Wisconsin.
El clima extremo se extendió desde los Grandes Lagos cerca de Canadá hasta el Río Grande a lo largo de la frontera con México. Alrededor del 60% de la población de los EE. UU. enfrentó algún tipo de aviso o advertencia de clima invernal, y las temperaturas cayeron drásticamente por debajo de lo normal desde el este de las Montañas Rocosas hasta los Apalaches.
Con la nieve arremolinándose en calles vírgenes e intransitables, los meteorólogos advirtieron que era posible que cayera de 30 a 60 centímetros (1 a 2 pies) adicionales en algunas áreas hasta la madrugada del lunes en medio de ráfagas de viento de 64 kph (40 mph).