El número de muertos por el terremoto del 16 de abril en Ecuador ascendió hoy a 660, mientras disminuyó la cantidad de desaparecidos y de personas albergadas, de acuerdo con el más reciente informe oficial.
Según la Secretaría de Gestión de Riesgo, casi 15 días después de sismo de 7,8 grados que devastó la costa noroccidental ecuatoriana, se desconoce el paradero de 33 individuos, al tiempo que la cantidad de personas ubicadas en albergues se redujo de casi 30 mil en los últimos días, a 22 mil 421.
La entidad estatal dio cuenta además que 133 personas fueron rescatadas con vida de entre los escombros, y que 30 mil 73 ciudadanos recibieron atención médica en los centros de salud instalados después de la tragedia, aunque aclara que de esa última cifra, solo cuatro mil 605 resultaron heridas durante el movimiento telúrico.
Hasta el momento se distribuyeron 246 mil 593 kits de alimentos entre la población afectada, agrega el texto.
Cifras previas divulgadas por las autoridades señalan que el terremoto destruyó seis mil 998 edificaciones y afectó a otras dos mil 740 en la provincia de Manabí y la parte sur de la vecina Esmeraldas.
Este viernes, el presidente Rafael Correa instó a los ecuatorianos a visitar las ciudades afectadas para de esa forma contribuir a revitalizar la economía local.
La mejor forma de continuar ayudando es dinamizando la economía local, aseveró el mandatario mediante su cuenta en la red social Twitter.
Según Correa, quien mañana hará su tradicional informe semanal de labores desde Portoviejo, cabecera de Manabí, en lugar de marchar el 1 de Mayo, los miembros de su gabinete, los militantes de la gobernante Alianza PAIS y la Central Unitaria de Trabajadores, entre otras organizaciones, decidieron invadir Esmeraldas y Manabí con sus familias.
Será el mejor homenaje a nuestros trabajadores. Si es posible pernoctar del sábado al domingo, mejor, aunque sabemos que la economía está difícil y, además, es muy comprensible el temor, agregó.
El proceso de remoción de escombros y demoliciones urgentes de estructuras con mayor riesgo de derrumbe inició en Portoviejo, Manta, Pedernales, Bahía y otras localidades afectadas por lo se considera ya la peor tragedia que azota Ecuador desde el terremoto que destruyó la ciudad andina de Ambato en 1949.
Aunque el costo real de la devastación causada por el sismo del 16 de abril no se conocerá hasta dentro de seis semanas, Correa estimó los daños en por lo menos tres mil millones de dólares.