Yamato Tanooka, el niño de 7 años, que fue abandonado por sus padres en un bosque como castigo abandonó el hospital donde estaba internado desde el pasado viernes tras permanecer seis días desaparecido.
El niño, acompañado por su padre y el personal del centro, abandonó caminando el hospital y saludó a los medios respondiendo tímidamente a los periodistas: «Estoy bien».
Yamato, quien llevaba una gran pelota de béisbol, fue abandonado el pasado 28 de mayo por sus padres que lo bajaron del vehículo porque se había portado mal en una zona boscosa en la isla de Hokkaido.