En la VII Cumbre de los jefes de Estado y de Gobierno de los países miembros de la Asociación de Estados del Caribe (AEC), el presidente Nicolás Maduro agradeció el comunicado que esta asociación emitió en respaldo al diálogo entre el sector oficialista de la Revolución Bolivariana y la oposición venezolana.
Al respecto, el presidente de Venezuela mencionó las múltiples ocasiones en las que se ha intentado encausar por la vía del respecto, de los derechos humanos, de la libertad y de la democracia a una oposición que se ha regido por acciones violentas e intentos de golpes de Estado en los 17 años de historia de la Revolución Bolivariana.
Para ilustrar, Maduro recordó la ocasión en la que convocó a una Comisión por la Verdad para la reparación a las víctimas, para el perdón y para alcanzar la paz y la justicia en torno las hechos turbulentos causados por las continuas actividades conspirativas e intentos de golpes de Estados en contra de la Revolución, pero la oposición se negó.
«Ellos tienen un solo plan: derrocar el Gobierno Revolucionario», indicó el mandatario quien afirmó que ha solicitado el apoyo internacional pero sobre la base del respecto de la soberanía nacional.
«Ojalá ahora podamos sentar en una mesa de diálogo, sin que se paren, sin que rompan las reglas del juego», expresó.
Asimismo, añadió que espera enviar «un mensaje bien claro de soberanía compartida de América Latina a los poderosos del norte que creen que es el momento de venir por un país que si ha dado algo en su historia es su sangre, es su vida, es su solidaridad, es la patria de Bolívar, fresca esta la huella del comandante Hugo Chávez».
Estas palabras fueron manifestadas referente a la posible activación de la Carta Democrática Interamericana que impulsa el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro.
«¿Carta democrática contra Venezuela? Por favor, atrévanse. Venezuela pudiera ser la reina democrática de todo el continente con una democracia participativa y protagonica», azuzó el mandatario venezolano.
«No son tiempos de intervencionismo y ni de injerencia, es tiempo de respeto. Venezuela exige respecto a su soberanía a sus derechos, a su autodeterminación a decidir su sistema político, económico y social que corresponda a nuestra Constitución y a nuestra vida social», sentenció, quien entre aplausos del público asistente a la Cumbre de la AEC agregó: «No se puede pretender romper el equilibrio de convivencia política de la región para ceder a las presiones inmensas de Washintonh contra Venezuela».
En este sentido, el mandatario venezolano hizo un llamado a los Gobiernos del continente para que, primero, mantuvieran el nivel de solidaridad, cooperación y entendimiento que los ha caracterizado; y segundo, para que no se dejaran someter a ningún tipo de presión para aprobar un instrumento «que sería una vergüenza si se aprobara contra nuestro país».
«Venezuela va a luchar. Con carta democrática o sin carta democrática, Venezuela no se va a doblegar y si nos pretenden acorralar vamos a pelear de frente, que lo sepa el mundo entero: Venezuela no se va a entregar, no se va a arrodillar y vamos a luchar con la misma fuerza que hemos luchado contra golpes y contra todo tipo de intervencionismo durante 17 años», concluyó el Ejecutivo.