Un ex trabajador de una empresa que fue despedido en abril mató a cinco antiguos compañeros e hirió a otras siete en el edificio de oficinas, antes de suicidarse este lunes en Orlando, según confirmó la policía del condado de Orange.
El atacante de 45 años se suicidó después del tiroteo. Según las autoridades de ese condado, el hombre disparó a sus excolegas.
«Era un empleado disgustado que volvió al negocio esta mañana», dijo el alguacil del condado de Orange, Jerry Demings.
Seis personas murieron, incluido el atacante por lo que se informó que el hecho no tiene vínculos terroristas.