El ciudadano indio Ram Gopal Patel, de 39 años de edad, admitió haber amputado los genitales de su hijo con un hacha y luego dejarlo morir desangrado por recomendación de un brujo de su comunidad en La India.
El hombre admitió haber asesinado a su hijo Rupesh con la ayuda del brujo Rajesh Yadav le dijo que debía sacrificarlo para deshacerse de los malos espíritus que provocaban ruidos extraños y el movimiento de objetos dentro de su casa de habitación.
Según la policía este desquiciado hombre golpeó en la cabeza a su hijo y luego le amputó su miembro viril con un hacha y lo dejó morir en el suelo en medio de un charco de sangre.