En un impresionante operativo, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) de Paraguay asestó un duro golpe al narcotráfico en la localidad fronteriza de Salto del Guairá, cerca de Brasil.
La operación, parte del Operativo Ignis, derivó en la muerte de nueve presuntos narcotraficantes y la detención de otros 10, desmantelando un poderoso grupo criminal liderado por el supuesto mafioso Ricardo Luis Picolotto, alias «R7».
Este operativo, que contó con la colaboración de agencias antidrogas y de seguridad tanto brasileñas como paraguayas, se desplegó desde el amanecer en el departamento de Canindeyú, cercano al lago Itaipú.
Francisco Ayala, portavoz de Senad, en una conferencia de prensa en el lugar de los hechos, describió la operación como un golpe considerable a la estructura criminal. «Su ejército de 18 personas fue desarticulado: nueve de ellos abatidos y 10 detenidos», informó.
Javier Rachi, jefe antidrogas, reveló que una fuerza conjunta de militares y policías allanó la granja donde fue capturado el capo brasileño tras un sangriento enfrentamiento.
Picolotto, conocido por su involucramiento en el tráfico de armas y drogas, fue identificado como uno de los socios más cercanos del narcotraficante paraguayo Felipe Santiago Acosta, alias «Macho», el criminal más buscado por la policía.
Durante la operación, las autoridades incautaron alrededor de 40 armas automáticas, incluyendo una antiaérea, chalecos antibalas, radios, celulares y una decena de vehículos de alta gama.
El Operativo Ignis no solo representa un triunfo significativo en la lucha contra el narcotráfico en la región, sino que también demuestra la efectividad de la cooperación internacional en la erradicación de estas redes criminales.