Un niño de 8 años que murió al ser embestido por un camión que se estrelló durante una carrera a campo traviesa en México era hijo de un cura que trabaja con jóvenes del sur de California, informaron fuentes eclesiásticas.
El niño Xander Hendriks y su madre, Melissa Hendriks, fueron golpeados por un camión cuando observaban la carrera SCORE Baja 500 en Ensenada el sábado, dijo la iglesia conocida como Pacific Coast Church.
Xander quedó herido mortalmente y su madre estaba hospitalizada en condición estable.
Una tercera persona también resultó lastimada. El niño era hijo de Brandon Hendriks, un cura que trabaja con jóvenes, dijo la Iglesia en San Clemente. «Por favor oremos por Brandon y Melissa en este momento tan difícil», indicaron las autoridades eclesiásticas en un comunicado.
El camión era conducido por Todd Pederson, director general de Vivint, una firma de seguridad con sede en Utah. Pederson dijo que se estrelló poco después de arrancar debido a que no acertó a dar una vuelta.
Un informe de la policía de Ensenada, suministrado a The Associated Press, dice que un hombre identificado como «Todd N» perdió el control de su camión cuando trataba de dar un giro y embistió a un grupo de personas que estaban fuera de área permitida para espectadores.
Pederson fue puesto en libertad el domingo tras ser interrogado por las autoridades. El niño fue declarado muerto en el hospital, dice el informe. Su madre resultó herida en la cabeza y las piernas.
No se divulgaron detalles sobre el estado de salud de la tercera persona afectada. Pedersen dijo en un comunicado que está sumamente acongojado y que se solidariza con la familia de las víctimas.