Una joven madre identificada como Anastasia Scherbinina, de 25 años, murió electrocutada cuando se bañaba y su teléfono celular cayó en el agua, en Rusia.
Según una amiga, la mujer de 25 años estaba esperando una llamada importante y tal vez por esta razón decidió no apartarse del teléfono.
La descarga provocó de inmediato una caída, cuyo estruendo escuchó el hijo de la víctima, de 4 años.
El menor avisó a su bisabuela, quien tomó un taxi para verificar lo que había ocurrido en la vivienda. Cuando llegó, el niño le dijo: “le di unas bofetadas en la mejilla, pero estaba muerta”, aseguran medios locales.