Donna Roberts, fue arrestada por la policía de Nueva Jersey, luego que en su casa fueran encontrados los cadáveres de 44 perros congelados en bolsas de plástico.
Además, los investigadores encontraron 130 animales viviendo en condiciones deplorables, 4 de ellos tan débiles que fueron llevados de emergencia al veterinario.
El resto fue atendido en el lugar por los trabajadores de protección animal.
Roberts fue acusada de varios cargos por crueldad animal, pero fue liberada en espera de una fecha para presentarse en la corte.
El olor a heces era tan fuerte, que miembros del departamento de salud del condado terminaron mareados y con náuseas durante la inspección.