La ministra de Educación Secundaria y para Adultos de Suecia, Aida Hadzialic, renunció a su puesto luego de haber dado positivo a un examen de alcohol de la policía mientras manejaba de regreso a su país tras asistir a un convierto en Copenhague, Dinamarca.
Ella era la ministra más joven en la historia de su país y ejercía el cargo desde el año 2014. Durante una rueda de prensa realizada este fin de semana dijó que su decisión responde a que quiere hacerse responsable por lo que hizo.
Hadzialic tenía 0.2 miligramos de alcohol en su sangre, la cantidad mínima que en Suecia se considera delito. «Entiendo que muchos están decepcionados por mí, estoy enfadada conmigo misma y profundamente arrepentida», dijo.
Formalmente presentará su renuncia el próximo lunes.