Un hombre de 26 años mató, descuartizó y se comió a su propia mamá en Madrid, España.
Según medios locales, dos agentes tocaron el timbre para preguntar por la víctima y fue entonces que aceptó el crimen y dijo “Si, mi madre está aquí. Fallecida”.
Al momento de entrar a la casa de la víctima, los agentes se encontraron una de las escenas más espeluznantes. El cuerpo de María Soledad Gómez, de 66 años, estaba repartido por toda la casa (en pedazos).
De acuerdo con los especialistas, el asesino tuvo que utilizar una máquina, una radial o una picadora, para el fin.
«El perro y yo nos hemos ido comiendo a trocitos a mi madre», manifestó espontáneamente el criminal.