El paso del huracán Matthew provocó lluvias torrenciales en las costas del sudeste en conjunto con fuertes vientos. Aunque se debilitó su intensidad, el alerta en las costas de Florida sigue vigente.
Tres millones de personas recibieron órdenes de evacuación en ese Estado y según la información difundida por la compañía Florida Power y confirmada por el gobernador de ese estado, Rick Scott, a través de su cuenta de Twitter, unos 593.875 usuarios se encuentran sin energía eléctrica.
El viernes por la mañana, Scott dijo que era una «bendición» que el estado no hubiese sufrido hasta el momento un azote directo de la tormenta como en otros países.