Este viernes fue confirmada la pena de muerte para la mujer apodada “la viuda negra”, que usaba cianuro para matar a sus amantes ricos y viejos para quedarse con sus herencias y seguros de vida.
Chisako Kakehi, de 72 años, fue declarada culpable por el asesinato de 3 hombres y el intento de asesinato de otro, un caso que conmocionó a Japón.
En más de una década logró una fortuna de 1.000 millones de yenes (unos 8,7 millones de dólares, 8,2 de euros) al cobrar los seguros de vida de sus cónyuges y heredar sus bienes inmobiliarios y depósitos bancarios, según la prensa japonesa.