El joven estadounidense Tire Sampson, de tan sólo 14 años de edad, murió el pasado jueves tras caer desde un juego mecánico instalado en el parque de atracciones Icon Park, ubicado en Orlando, Florida, Estados Unidos.
El adolescente, oriundo de Missouri, cayó desde la atracción llamada «Orlando FreeFall» y a pesar que fue trasladado de inmediato a un centro asistencial falleció a causa de sus graves heridas.
Esta torre de 131 metros de altura, denominada como la torre de caída más alta del mundo, lleva a sus 30 pasajeros hasta el tope y luego los deja caer hacia el suelo en un ángulo de 30 grados y a una velocidad de 120 kilómetros por hora.
Lo increíble del caso es que este juego mecánico había pasado una rigurosa inspección el pasado mes de diciembre, antes de que se le permitiera abrir al público, según reportaron varios medios estadounidenses.
Los padres del menor contrataron a dos abogados, identificados como Ben Crump y Bob Hilliard, para demandar a los dueños del parque e investigar si su muerte fue accidental o intencional.
Así mismo denunciaron que las autoridades del condado de Orange ni del parque se comunicaron con ellos tras la desgracia.
Las familias tienen derecho a esperar que estos parques temáticos, que ganan millones de dólares, mantengan seguros a sus hijos y pongan esa seguridad por encima de todo, dijo uno de los abogados de la familia.
Por su parte los empleados del parque aseguraron a un medio local que el jovencito estaba correctamente asegurado en su asiento, y no se explican cómo se pudo soltar estrepitosamente.
Un video publicado en redes sociales por el usuario 44vibe News, una página de noticias con 28.5 mil seguidores, se volvió viral y cuenta con casi 625 mil reproducciones.