El Parlamento italiano aprobó, este miércoles, la ley que legaliza la unión civil entre parejas homosexuales, un derecho que ya existe en la mayoría de los grandes países de Europa occidental.
La ley fue aprobada por 369 votos a favor y 193 en contra en la Cámara de Diputados, después de que fuera aprobada en febrero por el Senado, por lo que se convierte definitivamente en ley del Estado.
La nueva ley establece un estatuto para los que conviven tanto heterosexuales como homosexuales y crea para las parejas homosexuales una unión civil particular calificada de «formación social específica».
El texto establece ayuda recíproca moral y material, la pensión de supervivencia, el permiso de residencia para el cónyuge extranjero y también la posibilidad de adquirir el apellido del compañero.
Después de dos años de negociaciones y de semanas de intenso debate en el Senado, el gobierno decidió someter la ley al voto de confianza y evitar todo cambio al texto.