Un extraño suceso ocurrió en el departamento de El Paraíso, en el Oriente de Honduras donde un joven murió al asistir a la vela de su tío.
Según los medios de comunicación hondureños, el señor Genaro Díaz murió atropellado y estaba siendo velado en su casa de habitación ubicada en Los Encinos, Teupsenti, El Paraíso.
Durante la vela se instaló una planta de energía eléctrica para no pasar la noche a oscuras, y el joven Carlos Roberto Turcios, de 18 años, quien era sobrino del fallecido fue a descansar unas dos horas a la habitación donde estaba ubicada la planta eléctrica.
Sin embargo murió al inhalar el monóxido de carbono emitido por el generador de energía y cuando sus familiares fueron a buscarlo, se percataron que ya no era de este mundo, por lo que tuvieron que empezar a organizar el nuevo velorio.