El ciudadano británico Craig Smith, de 28 años, fue condenado a prisión de por vida por golpear salvajemente y matar al niño Teddy Tilston, de apenas 2 años de edad, y dejar gravemente herido a su hermano gemelo Cassidy en Liverpool, Inglaterra.
Lo increíble del caso es que este padrastro llamó a emergencias el pasado 1 de Marzo, quince minutos después que el niño falleció, fingiendo estar en un mar de lágrimas asegurando que se había ahogado mientras lo bañaba y que hasta trató de darle respiración boca a boca.
Tras la investigación se determinó que el niño ni siquiera estaba mojado y murió tras recibir un golpe muy fuerte en su abdomen el cual le provocó un sangrando interno pero además tenía 42 lesiones en su cabeza, sus orejas, su labio superior, su cuello y su mandíbula.
Su mamá Ashleigh Willett, de 25 años, no estaba en el momento del crimen ya que había llevado al hospital a su otro gemelo debido a que también fue golpeado en la cabeza minutos antes por este energúmeno que esperamos se pudra en la cárcel.
La mujer por su parte fue condenada por delitos de crueldad hacia menores de edad ya que no hizo nada por ayudarlos; aunque todavía no ha sido sentenciada.