Gabriel Henrique Santos Souza, de 28 años de edad, hijo de un pastor evangélico fue detenido por la policía brasileña tras haber asesinado a su amante, tras descubrir casi por casualidad que esperaba un hijo suyo.
Antonieli Nunes Martins fue encontrada sin vida el pasado 4 de febrero dentro de su propia casa en la ciudad Pimienta Bueno, localizada a 520 kilómetros de Porto Velho, en Brasil.
Una investigación determinó que ambos se encontraron la noche del miércoles 02 de febrero en la vivienda de la fémina pero tras una acalorada discusión el hombre terminó estrangulándola, posteriormente le propinó una estocada en el cuello.
Gabriel conoció a Antonieli en el lugar donde trabajaba y sostuvo a escondidas una relación extramarital durante los últimos 10 meses.
Pero hace unos días ella se hizo un examen de embarazo y al dar positivo lo encaró para que asumiera la paternidad. Gabriel entonces le pidió un plazo para hablar con su esposa y su familia.
Tras ello sostuvieron relaciones sexuales y una vez acostados en la cama el hombre decidió quitarle la vida con sus propias manos para evitar el escándalo de su infidelidad y el bebé que había gestado en su vientre.
«Estaba acostada sobre mi brazo izquierdo, de espaldas a mí (…). Ella forcejeó y luchó contra su propia muerte», dijo el hombre en su declaración ante la policía.
Tras dejarla inconsciente, se bajó de la cama y buscó un cuchillo de cocina, el cual le clavó en el cuello. Luego trató de borrar las evidencias y lanzó la prueba de embarazo en un río cercano.