El campesino Miguel Anaya Pablo, de 60 años de edad, murió el pasado domingo en el Hospital General de la ciudad de Tuxtepec, en México, luego de que fue atacado por su propio cerdo en la comunidad de San Lucas Ojitlán.
El anciano llegó bien borracho a su casa y sin motivo alguno comenzó a pelear con el puerco quien lo atacó a «tarascazos» amputándole tres dedos de la mano derecha y su miembro viril; causándole una infección severa.
Sus familiares lo trasladaron inmediatamente a un centro asistencial donde fue internado pero perdió la vida al día siguiente.