Un adolescente de Nueva Jersey se declaró culpable el lunes de un supuesto complot inspirado en el grupo yihadista Estado Islámico para matar al papa Francisco durante su visita a Estados Unidos en 2015.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos dijo que Santos Colón, de 17 años, trató de reclutar a un francotirador para dispararle al pontífice, así como detonar explosivos mientras se realizaba una misa en Filadelfia, el 27 de septiembre de 2015, al final del Encuentro Mundial de Familias.
Pero Colón involuntariamente contrató para el trabajo a un agente encubierto del FBI, y fue detenido discretamente 12 días antes del evento.
Colón se declaró culpable como adulto del cargo de intento de proporcionar apoyo material al terrorismo, cuya condena lleva un máximo de 15 años de prisión.