La Audiencia Provincial de Cantabria, España, ha condenado a un hombre a dos años de prisión por instalar cámaras y grabar videos en un apartamento que alquilaba a cuatro mujeres a través de la plataforma Airbnb.
El acusado grabó un total de 26 videos en los que se capturaban escenas íntimas de las víctimas durante su estancia de dos días, según recoge Europa Press. Además de la pena de prisión, deberá pagar una multa de 4.320 euros y se le prohíbe acercarse a las afectadas a menos de 500 metros durante tres años y nueve meses.
Los hechos ocurrieron en agosto de 2022, cuando las cuatro mujeres alquilaron un apartamento en Santander sin conocer la existencia de cuatro cámaras ocultas en el baño y en uno de los dormitorios.
La situación se tornó más alarmante cuando las inquilinas descubrieron al hombre, de 35 años, escondido en una habitación que no estaba incluida en el contrato, intentando retirar las cámaras que había instalado. Posteriormente, decidieron denunciarlo.
El juicio se celebró hoy lunes, y durante el proceso, el acusado se declaró culpable de cuatro delitos de revelación de secretos y uno de allanamiento de morada. Su arresto permitió a las autoridades acceder a los videos almacenados en su teléfono celular, después de que él mismo proporcionara el código de desbloqueo a los agentes.
Como respuesta a este tipo de incidentes, en marzo de este año, Airbnb anunció la prohibición del uso de cámaras de vigilancia en los alojamientos publicados en su plataforma, priorizando la seguridad y privacidad de sus usuarios.
Antes de esta medida, los dispositivos estaban permitidos en áreas comunes, siempre que se notificara su presencia, pero nunca en dormitorios o cuartos de baño, donde la intimidad de los huéspedes debe ser respetada.