Un niño de 12 años se encuentra en estado grave tras recibir varias puñaladas por parte de un supuesto activista de extrema derecha en un centro comercial de la ciudad de Oulu, en el norte de Finlandia.
El incidente ocurrió el jueves, cuando el sospechoso, identificado como Sebastian Lamsa, un hombre de unos 30 años vinculado a movimientos extremistas de extrema derecha, comenzó a apuñalar al niño sin mediar palabra.
Posteriormente, intentó atacar a otro niño de aproximadamente la misma edad, pero un guardia de seguridad logró impedir el segundo ataque.
Lamsa, quien según fuentes de la radiotelevisión pública finlandesa YLE era un «antiguo miembro clave» de la ilegalizada formación neonazi Movimiento de Resistencia Nórdico, se encuentra detenido y comparecerá ante el tribunal el próximo lunes.
Además, había sido condenado previamente por otro apuñalamiento durante la presentación de un libro de extrema derecha.
El primer ministro de Finlandia, Petteri Orpo, condenó el apuñalamiento, calificándolo como un «cobarde ataque contra los niños» y advirtiendo que «la violencia de la extrema derecha es una amenaza muy real» en el país.
Este trágico suceso se suma a la creciente preocupación por el auge de la extrema derecha en Europa, donde en más de la mitad de los países del Viejo Continente, estos partidos ya representan la segunda fuerza política, colocándolos a las puertas del poder.
Mientras tanto, el niño herido continúa hospitalizado en estado grave, aunque estable, según el último parte médico.