Al menos 70 personas han muerto y otras 60 se encuentran desaparecidas tras las torrenciales lluvias que han caído en el centro y el oeste de Japón, según informaron este fin de semana las autoridades niponas.
En total 1.6 millones de personas tuvieron que ser evacuadas de sus hogares debido a las lluvias, que fueron catalogadas de históricas por los expertos japoneses.
La Agencia Meteorológica de Japón emitió alertas en las tres perfecturas de la isla de Honshu y advirtió por posibles deslizamientos de tierra, la crecida del caudal de los río y fuertes vientos.
Los equipos de rescate han sacado en helicópteros a algunas personas que quedaron atrapadas en un hospital de Kurashiki, en la prefectura de Okayama, donde la crecida del río fue tan severa que destrozó todo.