La nicaragüense Agustina Dávila Moreno, de 26 años de edad, fue ultimada a balazos anoche en una calle de Aguas Zarcas, en San Carlos de Alajuela, Costa Rica.
Agustina era madre de varios niños y según el Organismo de Investigación Judicial, fue asesinada a tiros por desconocidos en el sector de la cuesta en Corredores.
Los investigadores llegaron al sitio después de que la Cruz Roja declaró sin vida a la nicaragüense, cuyo cuerpo fue trasladado a la morgue judicial para hacerle la respectiva autopsia.
El Organismo de Investigación Judicial está investigado el móvil del homicidio, así como la identidad y paradero de los asesinos.
En otro caso, el pinolero Harold José Zapata Rosales, de 33 años, fue ejecutado ayer de tres balazos en la cabeza junto a dos desconocidos, y sus cuerpos fueron hallados en un cauce del río Tiribí, en Escazú, San José, Costa Rica.
Los tres cuerpos presentaban golpes aparentemente ocasionados por actos de tortura.
Algunos residentes del área, relataron que a eso de las 2 de la madrugada, escucharon múltiples disparos, y se sospecha que a esa hora los ejecutaron.