Un bebé de apenas 34 días de nacido identificado como Ronan Delancy falleció en Estados Unidos tras desarrollar un caso grave de Parechovirus, un virus que es muy común en los niños pero que pueden ser muy mortal.
Los síntomas de Ronan comenzaron tan sólo 10 días después de nacer cuando su mamá Kat DeLancy comenzó a notar que su rostro se enrojecía aunque no tenía temperatura. Días después no dejaba de llorar.
Mi hijo se ponía rojo, dejó de comer casi por completo y todo el tiempo parecía somnoliento y con poca energía, comentó la acongojada madre a medios de comunicación estadounidenses.
Inicialmente los médicos creían que el niño tenía cólicos pero una noche fue llevado de emergencia al hospital de Connecticut con una oxigenación de apenas 70% y posteriormente le bajó hasta un 20%.
Hasta entonces descubrieron que el niño había sufrido de convulsiones y daño cerebral y hasta 4 días después comprobaron que el bebé se había contagiado de parechovirus.
Inicialmente los doctores le dijeron a DeLancy que su hijo mejoraría porque la mayoría de bebés contraen ese virus en algún momento de sus vidas y no presentan síntomas ni secuelas.
Sin embargo el niño no mejoró y cada día que pasaba su daño cerebral empeoraba aún más. Los escaneos cerebrales detectaron que su lóbulo frontal había desaparecido por completo.
¿Qué son los Parechovirus?
Los Parechovirus viven en los humanos, hurones y algunos roedores. La mayoría de los niños contraerán algún tipo de este virus a lo largo de su vida antes de comenzar la escuela de primaria, y éste desaparece 7 días después.
Sin embargo especialistas estadounidenses están preocupados por la aparición de la variante de parechovirus llamada PeV-A3 la cual se asocia con afecciones graves tales como meningitis y hasta encefalitis en niños recién nacidos.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos emitieron una alerta especial para que los proveedores de salud realicen pruebas de parechovirus en niños que tengan fiebre, convulsiones, pérdida de apetito, erupciones cutáneas y somnolencia inexplicable.
Los CDC alertaron que el parechovirus está circulando actualmente en Estados Unidos desde mayo de 2022 y han recibido informes en varios estados sobre infecciones en recién nacidos y bebés pequeños.