Tras realizar muchos esfuerzos y sacrificios, la familia de los compatriotas Freddy Roberto Picado Navarrete y Frederick Humberto Picado Paniagua, lograron finalmente repatriar este martes, sus cuerpos desde Panamá, donde fueron asesinados el domingo 8 de marzo.
Una pariente que viajó a Panamá dijo que para poder trasladar los cuerpos, tuvieron que vencer muchas dificultades, entre las que destacó los trámites, la tardanza en el transporte aéreo y lo principal, las limitaciones económicas que fueron mayormente resueltas en el seno familiar.
Freddy Roberto, de 48 años, y su hijo Frederick, de 24 años, fueron ultimados a balazos por delincuentes que irrumpieron en su casa ubicada en la provincia de San Miguelito en la capital de Panamá.
Según los informes periodísticos, dos delincuentes armados con pistolas ingresaron de madrugada a la casa, sorprendiendo a sus víctimas.
Supuestamente, la primera reacción de Frederick Humberto fue resistirse al asalto por lo que los maleantes le dispararon, y cuando el padre se abalanzó sobre los sujetos quienes también lo mataron.
Tras cometer el crimen, los delincuentes huyeron a bordo de una camioneta, en tanto, los vecinos alertaron a las autoridades policiales quienes se encargaran de investigar la identidad y paradero de los criminales.
Freddy Roberto Picado Navarrete y su hijo Frederick Humberto Picado Paniagua, eran oriundos del municipio de El Viejo en el departamento de Chinandega.