El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de Nicaragua expresó su firme respaldo a la denuncia del Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, respecto a la separación de padres e hijos migrantes en Estados Unidos.
Nicaragua califica esta práctica como una conducta punible que evoca las peores prácticas del fascismo hitleriano y exige acción inmediata de la comunidad internacional.
En un comunicado, Nicaragua condena la maligna persecución desatada sobre los Migrantes, Trabajadores honestos de tantas nacionalidades, que han llegado a los Estados Unidos de América alentados por su propia propaganda y perseguidos por la pobreza que ellos imponen en todos nuestros ricos y Sagrados Territorios de donde se han llevado lo mejor, condenándonos a las más extremas formas de miseria.
Esta política de persecución, expoliación y apropiación de nuestras riquezas materiales y humanas, ha sido revivida en sus más abominables extremos, mereciendo la condena, la repulsa y el aborrecimiento de las Familias del Mundo, que repelen cotidianamente el horror que esta conducta punible representa, destacó Nicaragua.
El gobierno nicaragüense exige a las Naciones Unidas, a la que pide ser refundada, una acción inmediata para detener el odio racial, prepotente y hegemónico que se ha desatado.
Asimismo, insta a los politizados Organismos, llamados de Derechos Humanos, a reclamar y actuar para detener estos crímenes y devolver a las familias su integridad.
Nicaragua coincide plenamente con el Justo Reclamo y la Exigencia del Presidente Nicolás Maduro Moros, de detener los secuestros de los Migrantes, y entre ellos los Migrantes venezolanos, y responder por sus crímenes ante el Juicio que, a falta de Organismos valientes, la Humanidad impulsa y promueve legítimamente, contra la maldad fascista e imperialista.
El comunicado concluye con un llamado a que cese la monstruosa política de separación de las Familias y de encarcelación de Seres Humanos que sólo exigen el Derecho a trabajar y vivir en Paz.