El pinolero Bernardo Sánchez Pérez, de 59 años, falleció la noche de este martes al recibir balazos en el tórax y la boca, durante un tiroteo armado entre los conductores de dos vehículos en las afueras de la iglesia San Agustín de Hipona, en Cinco Esquinas de Tibás, Costa Rica.
Vecinos del lugar indicaron que los pistoleros se dispararon entre ellos, sin lograr impactarse, mientras que el compatriota Bernardo Sánchez, quedó en medio del fuego cruzado y fue alcanzado por dos proyectiles.
El nica Bernardo Sánchez laboraba cuidaba carros en el estacionamiento de la parroquia San Agustín, donde la feligresía lamentó su muerte, recordándolo como un hombre servicial y atento, por lo que condenaron el hecho.
Al momento del crimen del coterráneo, el sacerdote Denis Feliz de La Cruz, estaba entregando la parroquia San Agustín, de Tibas, al cura que lo llegó a relevar.