De un disparo de escopeta en la espalda, fue muerto la noche del viernes, Larry Steven Castro Rugama, de 24 años, tras un confuso incidente ocurrido en una calle del barrio Francisco Rojas, en el municipio de Tipitapa, en Managua.
El señor Estiser José Castro, de 48 años, dijo que su hijo Larry estuvo bebiendo licor desde horas de la tarde con varios amigos y cuando iba a comprar más guaro, un supuesto enemigo le disparó por la espalda.
A pesar de lo dicho por el señor Castro, en el barrio se conoció otra versión de los hechos, la cual detalla hasta el saqueo y daños a una vivienda por parte de un grupo de personas, entre las que supuestamente estaba el ahora fallecido.
Según esta otra versión, los hechos ocurrieron después que por viejas rencillas personales un grupo de sujetos armados con escopetas hechizas y machetes ingresaron a la casa de un enemigo, destruyeron lo que había dentro y robaron un televisor, un equipo de sonido y la provisión del mes, entre otras cosas.
Leer también: Desde trabajo a domicilio hasta tragar se… Las trabajadoras sexuales y el Covid-19 en Italia
La señora que estaba en ese momento en la vivienda denunció que al escuchar que un grupo de sujetos estaba rompiendo el candado del portón, ella huyó con su pequeña hija por la parte trasera, por lo que cuando los delincuentes ingresaron no había nadie y aprovecharon para hacer de las suyas.
Según la afectada, los antisociales amenazaban con quemar la casa y luego fueron a meterse a las viviendas de otros familiares donde robaron una moto y rompieron el vidrio de un carro.
Fue en ese momento que supuestamente otro grupo de sujetos allegados a los afectados decidió frenar a los atacantes, saliéndoles por detrás, dando como resultado el disparo contra Larry Castro, quien cayó al frente de la vivienda donde fueron cometidos los daños.
Aún con vida, Larry Castro fue llevado en una ambulancia de la Cruz Roja al hospitalito Yolanda Mayorga, de Tipitapa, adonde ingresó sin los signos vitales.
Agentes policiales se presentaron a la vivienda donde se registró el saqueo y la destrucción y en el patio aún se encontraba una mochila con una pulidora eléctrica que había sido supuestamente sustraída del inmueble.
Informes recabados en el sector indican que las viejas rencillas entre estos dos grupos de pobladores ya ha mandado a varios de ellos a la cárcel y supuestamente inició cuando uno de ellos se le fue arriba al otro con la mujer hace muchas lunas.