Un crimen insólito, es la única definición que puede dársele al caso del joven Elías Omier Peter, de 17 años de edad, quien fue asesinado a puñaladas por equivocación, tras acostarse a dormir con los zapatos de un tío que se los había prestado, y quien en realidad sería la víctima del criminal.
Se trata del homicidio que ocurrió la madrugada del primero de mayo en la comunidad El Vesubio, a 12 kilómetros al Noroeste del casco urbano de Bonanza, Caribe Norte, en donde Elías fue muerto de cuatro cuchilladas dentro de un campamento, mientras dormía en una hamaca.
Los detalles del hecho fueron revelados por el asesino Gabriel Casildo Casanova, de 32 años de edad, quien al ser detenido la tarde del jueves, confesó que él tenía planificado quitarle la vida al tío de Elías, don Efraín Wesly Figueroa Lacayo, por haberlo estafado vendiéndole una broza de oro falsa.
Días antes de cometer el crimen, el asesino observó bien los zapatos que usaba don Efraín y cuando entró al campamento en la oscuridad se fue hamaca por hamaca, alumbrando con una lamparita, el calzado de los que estaban acostados, hasta dar con los de su presunta víctima, y la atacó a cuchilladas.
Sin embargo, ahora se sabe que don Efraín Wesly Figueroa le había facilitado los zapatos a su sobrino, quien acabó muerto inocentemente, a manos del bruto sujeto.
De acuerdo a cazadores de noticias, el homicida Gabriel Casildo Figueroa ya había estado preso por tenencia de drogas, hurto, robo con violencia, lesiones y portación ilegal de armas de fuego, y en las próximas horas será puesto a la orden de las autoridades judiciales por el delito de asesinato.