Ksenia Pitchkin, de 21 años, fue asesinada por su novio, quien después la descuartizó y tiró los restos al inodoro.
El hecho ocurrió en Kémerovo, Rusia y según medios locales, la joven fue partida en trozos.
El 20 de mayo la joven fue reportada como desaparecida luego de que saliera de casa y no volviera y su cuerpo fue encontrado por trabajadores del sistema de alcantarillado que encontraron pedazos del cuerpo.
En el lugar hallaron piel humana y cabello. Estos fueron mandados a que les practicaran una prueba de ADN, determinando que era Ksenia.
La Policía aún no han difundido los motivos del asesinato. El sospechoso, quien fue arrestado y se encuentra bajo custodia, enfrenta hasta 15 años en prisión de ser condenado.