Tu Nueva Radio YA conversó en exclusiva con Dalila del Socorro Guerrero Sánchez, de 32 años, ex mujer de Herlio Jarquín, quien relató la manera como nació el apodo “Furia y Toro”, el hombre considerado como el delincuente más peligroso de Carazo.
“Él me contó que cuando tenía 7 años, su mamá Andrea Cortez lo mandó a comprar gas para rellenar el candil y alumbrarse en la noche, pero en el camino le salieron unos chavalos que lo estafaron”, relató Dalila Guerrero, la mujer que dejó a Herlio Jarquín porque descubrió que se la pegaba con otra Julieta.
“Los chavalos le dijeron que ellos le venderían el gas, le pidieron el dinero y se metieron en lo oscuro y luego le entregaron una pichinga con líquido amarillo”, cuenta Andrea quien le tuvo una hija a Herlio, la que hoy tiene 7 años de edad.
La caraceña contó que doña Andrea rellenó el candil con el líquido que le dio Herlio, y al ver que no encendía, olio el recipiente y descubrió que era orín lo que había comprado, y en ese momento le pegó una buena “pijeada” al “Furia y Toro”.
Tal cual era un chavalo grande, Herlio dijo: “Ahora si me siento furioso por lo que me hicieron” y acto seguido se fue a buscar a los chavalos que le “dieron vuelta” y les quitó los “riales”, y desde ese día quedó apodado “Furia”.
El complemento de “Toro”, Herlio Jarquín lo adquirió por su fuerza, dado que según sus conocidos, cuando este trabajaba en construcción, era capaz de subirse dos baldes con mezcla, uno en cada hombro, acción en la que no empleaba mucho esfuerzo.
Incluso, hay caraceños que relatan que Herlio Jarquín era “rigioso” a levantar piedras canteras y otros materiales pesados, para demostrar su fuerza.
El “Furia y Toro” fue recapturado la noche del pasado 25 de febrero, en la comarca La Ceibita, en el municipio de Diriamba, departamento de Carazo, durante un fuerte operativo ejecutado por agentes policiales y efectivos militares.