El trabajo coordinado de los buzos de la Fuerza Naval del Ejercito y los lugareños rindió fruto este miércoles al lograrse encontrar los cuerpos de 3 personas que estaban desaparecidas tras hundirse la lancha en que viajaban en el lago Apanás, en Jinotega.
El primer cuerpo en ser encontrado fue el de Diego Javier Cruz Montes, de 18 años, al mediodía. 3 horas después los buzos extrajeron de las aguas del lago Apanás el cuerpo de Magaly García Altamirano, de 19 años, y a las 5:30 de la tarde se halló el cadáver de Martha Lanzas Herrera.
A la búsqueda de los desaparecidos también se sumó don Guadalupe López Sequeira quien, poniendo en práctica un ritual de antaño, utilizó un guacal con una vela en su interior para ayudar al Ejército a descubrir el punto exacto donde estaba hundida la lancha y los cuerpos de Diego Javier, Magaly y Martha.
Don Lupe es oriundo de la comunidad Mancotal, y dijo que anoche soñó con que encontraba los cuerpos utilizando ese ritual del guacal, lo que dio resultado este miércoles.
El ritual del guacal consiste en poner una vela encendida dentro y colocarlo sobre el agua, cuyas corrientes se encargan de moverlo hasta el lugar donde están los cuerpos, y ahí se queda fijo, lo que ocurrió este miércoles.
Los cuerpos de Diego Javier, Magaly y Martha fueron introducidos en ataúdes forrados de metal, para que sus familiares los velen esta noche, y mañana jueves les den cristiana sepultura en la comunidad El Naranjo, de donde era originarios.
El vuelco de la lancha también provocó la muerte de 2 niños, cuyos cuerpos fueron recuperados a las pocas horas de ocurrida la tragedia el domingo pasado.
Diego Javier, Magaly, Martha, y los 2 niños, viajaban con otras 4 personas que lograron sobrevivir al nadar a la orilla cuando la lancha se volcó y hundió, porque el conductor de la embarcación se puso a hacer piruetas.
El conductor de la lancha, Maycol Herrera, de 24 años de edad, fue detenido para que responda por la muerte de las 5 personas, que junto a los sobrevivientes participaban de un paseo familiar.
Familiares de las victimas agradecieron al Gobierno del Comandante Daniel Ortega y la compañera Rosario Murillo, por el apoyo brindado en la búsqueda de sus parientes.
El Lago Apanás es el primer lago artificial de Nicaragua y fue creado en 1964 por la inundación del valle de Apanás con el caudal del río Tuma. Tiene una superficie de 51 kilómetros cuadrados aproximadamente y cruzarlo de una orilla a otra se demora una hora.