El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas en Nueva Orleans deportó a la nicaragüense Keyla Yoheydi López Salazar, tras señalarla de contar con múltiples antecedentes penales en Estados Unidos.

Entre los delitos que se le atribuyen figuran agresión agravada con arma mortal, agresión por intoxicación con vehículo y accidente con lesiones corporales graves.
Esta expulsión se da en el marco del reforzamiento de las deportaciones y la retención de inmigrantes en Estados Unidos, ordenada por Donald Trump.