El Presidente de la República, Comandante Daniel Ortega Saavedra, exigió a los Estados Unidos “respetar a Nicaragua si quieren contribuir con la paz”, en sus palabras al pueblo nicaragüense tras culminar una multitudinaria caminata demandando justicia, paz y vida, para todas las víctimas del terrorismo golpista.
En esta segunda caminata realizada en el mes de Septiembre Victorioso, el Presidente Daniel rememoró la gesta heroica de la Batalla de San Jacinto “que está en el centro, en el corazón de nuestra vida, de nuestra historia, de nuestra formación”.
“Desde niños aprendemos que la independencia de Nicaragua, la soberanía de Nicaragua, se defendió por primera vez en San Jacinto y ahí se alcanzó por primera vez la victoria”, afirmó.
El Presidente sostuvo que la Batalla de San Jacinto constituye la primera gran victoria contra el expansionismo del imperio del norte, del imperio yanqui.
“No los buscamos nosotros a ellos, no fuimos los nicaragüenses, no fue Andrés Castro a buscar pleito con los yanquis, fueron los yanquis los que vinieron a atacar y adueñarse de Nicaragua. Es la realidad de nuestra historia y quienes trajeron a los yanquis, los vendepatrias de ayer que son los mismos vendepatrias de hoy, los mismos, ellos los trajeron”, sentenció.
El Comandante hizo una síntesis de la historia de Nicaragua, enmarcada en la Batalla de San Jacinto.
“Fíjense desde hace cuánto tiempo, fíjense. Y es que estaba el pleito aquí entre los que Sandino llamó vendepatrias, peleles. Estaban peleando entre ellos, fíjense qué ejemplo para las futuras generaciones desde entonces, liberales y conservadores en guerra, llevando a matarse a los trabajadores, a los campesinos, a los que llamaban los mozos de sus haciendas, que eran sus soldados. Se llamaban entonces, estos partidos, legitimistas y democráticos. Y uno de ellos estaba atrincherado en León, allí estaba la capital decían ellos, allí estaba el gobierno decían ellos. Y el otro estaba atrincherado en Granada y allí, decían, es la capital de Nicaragua, y mientras tanto mandando a matarse a los campesinos, a los mozos de sus fincas, a los trabajadores. Y los dirigentes de los dos partidos pidiéndole al yanqui que viniera ayudarles y por ese camino se vino William Walker, un yanqui de mentalidad totalmente reaccionaria, conservadora, esclavista, que soñaba con adueñarse de Nicaragua, para después de adueñarse de Centroamérica, después de México y adueñarse de Estados Unidos e imponer las doctrinas más conservadoras y más reaccionarias del momento”, explicó.
“Fíjense quién nos tocó, traído por los vendepatrias. ¿Y qué fue lo primero que hizo Walker? Lo primero que hizo fue imponerse a los que creían que Walker les iba a servir, el yanqui les dijo no, ustedes me van a servir y se convirtió en presidente de Nicaragua, fíjense, un yanqui, William Walker, presidente de Nicaragua”, añadió.
A pesar de la vergüenza que eso significó para el país, el Presidente Daniel aseveró que el pueblo nicaragüense defendió su dignidad, “y las mismas fuerzas políticas que se dieron cuenta de que el yanqui también empezaba a perseguirlos a ellos, a los que lo habían traído; entonces no les quedó más que unirse. Y con Nicaragua unirse también los países centroamericanos porque se daban cuenta de que si caía Nicaragua bajo el dominio del yanqui, también iba a caer toda Centroamérica”.
El Comandante también destacó que fue en el mes de Septiembre Victorioso cuando se dio la declaración de independencia de Centroamérica de la corona española.
Celebramos “un aniversario más de la independencia de España, de toda Centroamérica. Y un aniversario más del 14 de septiembre, de la Batalla de San Jacinto y el 15 de septiembre, un aniversario más de la Independencia de Centroamérica. 15 de Septiembre de 1821 independencia de Centroamérica y 14 de septiembre de 1856 la gloriosa Batalla de San Jacinto, y allí Andrés con la piedra lanzándola contra el invasor y derribando al invasor”.
“Esa ha sido nuestra historia, estar luchando cuando queremos paz. No hay pueblo que quiera vivir en guerras, no hay pueblo que quiera vivir en inseguridad, las familias, los pueblos quieren vivir en paz, pero las políticas imperialistas, expansionistas de los Estados Unidos, no le han permitido vivir en paz al pueblo nicaragüense y no solamente al pueblo nicaragüense, sino que también a muchos pueblos hermanos que han sido víctimas de las intervenciones, de las agresiones de los Estados Unidos, de las invasiones de los Estados Unidos”, reflexionó.
Once años de desarrollo con el FSLN
El Comandante destacó que Nicaragua siempre ha luchado por la paz y después de tanto sacrificio desde el 2007 a través de los votos el Frente Sandinista retornó al gobierno.
“A partir del 10 de enero del año 2007, llegamos nuevamente al Gobierno a través de los votos de forma pacífica, no de forma violenta, sino que de forma pacífica a través de los votos llegamos, y ahí empezamos todos a construir la paz, partiendo primero de la seguridad para todas las familias nicaragüenses, de la estabilidad para todas las familias nicaragüenses, empezamos a construir la paz”.
Dijo que “Nicaragua se convirtió en un ejemplo de un país pequeño en su economía, pequeño en su población, pequeño en su territorio, que empezaba a avanzar en la lucha contra la pobreza, en la generación de empleos, en la construcción de caminos, carreteras, calles para el pueblo, en programas a las mujeres del campo, el programa Hambre Cero llevado a la mujer del campo, el programa Usura Cero para las mujeres y familias trabajadoras que tienen sus pequeños negocios, el programa Plan Techo, el paquete de alimentos para las familias que están en condiciones realmente precarias. El bono productivo”.
“Todo esto lo logramos caminando juntos la inmensa mayoría de los nicaragüenses, la mayoría porque siempre está la excepción y la excepción eran aquellos que habían ensangrentado a Nicaragua con la dictadura somocista y continuaron ensangrentando a Nicaragua después del triunfo de la Revolución en el 79 y trajeron nuevamente la guerra a Nicaragua llamando al yanqui para que se metiera a intervenir en Nicaragua”, indicó.
Sin embargo, cuestionó que los vendepatrias no le perdonaban al pueblo que el pueblo le hubiese dado el voto al Frente Sandinista para que llegara al gobierno en el año 2007.
“Continuaron con sus conspiraciones y continuaron con sus viajes a los Estados Unidos para buscar cómo destruir a Nicaragua, porque el plan de ellos era destruir al gobierno, pero para poder destruir al Gobierno, decían, no hay más que destruir a Nicaragua, destruir la economía, destruir hospitales, destruir centros de salud, destruir Nicaragua”.
“Y ahí empezaron ellos con sus planes siniestros. Tuvimos 11 años de cohesión social, económica, productiva, de reconciliación, pero al final vino la agresión, vino la intervención, la intervención armada que ha provocado dolor en las familias nicaragüenses, ha provocado la muerte de hermanos nicaragüenses, heridas en hermanos nicaragüense, heridas en las familias nicaragüenses y que ha provocado también que algunos hermanos nicaragüenses se hayan ido a Costa Rica”, afirmó.
El Presidente Daniel también se refirió a los nicaragüenses que por la violencia se fueron a Costa Rica en los últimos meses.
“Les decía la última vez que se hablaba de 26 mil nicaragüenses, pero las mismas autoridades de Costa Rica se han encargado de aclarar, que hay muchos nicaragüenses allá que tienen tiempo de estar, que piden ser acogidos allá en Costa Rica legalmente. Y que de esos veinte y pico de mil, el 80% son esos nicaragüenses que ya estaban ahí. Que los que salieron de Nicaragua a raíz de esta situación de violencia, lo estaban diciendo ayer, lo han dicho hoy, están hablando de una cantidad de 5 mil nicaragüenses, 6 mil nicaragüenses, 10 mil nicaragüenses si acaso. Y todavía están ahí viendo cuáles son los nicaragüenses que ya estaban en Costa Rica, buscando como legalizarse, y cuántos son los que llegaron a partir de esta situación de dolor de Nicaragua”, explicó.
El Comandante hizo un llamado para que todos esos hermanos nicaragüenses regresen al país.
“Y ya les hacíamos el llamado nosotros que regresen. O sea, el que no mató, el que no torturó, el que no asesinó, el que no incendió, puede regresar sin temor alguno, se le va a acoger en el barrio, se le va a acoger en la comunidad, se le va a acoger en el pueblo, porque tenemos que reencontrarnos y reconciliarnos todas las familias nicaragüenses”, aseguró.
Asimismo, se refirió al diálogo del pueblo que impulsa el gobierno sandinista. Dijo que debe seguirse profundizando ese diálogo entre las familias para lograr consolidar la paz.
Porque “consolidando la paz también aseguramos la estabilidad y la tranquilidad de todas las familias nicaragüenses, no importa el pensamiento político, no importa la ideología, no importa la religión, eso se respeta y se debe respetar, no importa la opinión que tengan, lo importantes es que podamos vivir en Nicaragua todos los que pertenecemos a esta Patria de Darío y de Sandino”.
“Estamos cobijados por Dios, por Cristo, todos, toda la inmensa mayoría de los nicaragüenses estamos cobijados por Dios, por Cristo, y tenemos que poner a prueba todas nuestras capacidades toda nuestra disposición, toda nuestra generosidad para que nos vayamos reencontrando, nos vayamos entendiendo todos y volvamos a fortalecer el camino del progreso, del bienestar, de la lucha contra la pobreza para que Nicaragua sea una sociedad feliz”, precisó Daniel.
Nicaragua merece respeto
El Comandante Daniel envió un mensaje al gobierno de los Estados Unidos, demandando respeto a Nicaragua y a su pueblo que merece vivir en paz.
“¿Qué le decimos a los Estados Unidos de Norteamérica?, le decimos que si quieren ayudarle al pueblo nicaragüense, que si quieren contribuir a la paz, lo mejor que pueden hacer y deben hacer es no meterse con Nicaragua, respetar a Nicaragua, porque desgraciadamente lo que conocemos de la historia de los Estados Unidos, de sus políticas intervencionistas, lo que han provocado es más dolor, más sufrimiento en las familias nicaragüenses, entonces le decimos a los gobernantes norteamericanos, le decimos a los congresistas norteamericanos, le decimos que si quieren contribuir con la paz de Nicaragua, que respeten a Nicaragua como una nación soberana, como una nación digna, como una nación, que como cualquier nación del mundo, merece respete y se le debe respeto”, dijo Daniel.
Resaltó el esfuerzo del pueblo amante de la paz que nuevamente caminó desde la rotonda Jean Paul Genie, hasta la rotonda Hugo Chávez, en una jornada llena de amor y de alegría.
“Hoy han marchado una vez más y yo le veo los rostros cuando vienen marchando y les veo los rostros cuando nos reunimos aquí y a pesar del dolor, y de la justa indignación no veo en sus ojos odio, ni malos sentimientos, al contrario, veo en sus ojos, en sus gestos, en sus palabras, deseos de paz que solamente pueden salir cuando en el corazón de la persona, de la mujer, del hombre, hay amor. Cuando hay amor entonces hay deseos de paz”, sostuvo.
Dio gracias a Dios que en estas caminatas no ocurrieran hechos lamentables y eso es lo que deben respetar aquellos nicaragüenses que no abrazan el modelo Cristiano y Socialista.
“Que hagan sus marchas, está bien, pero que lo hagan de forma pacífica, que no lo hagan provocando daños, que no lo hagan lanzándose a quemar los vehículos de la policía, hay que eliminar la violencia y así podrán marchar las veces que quieran sin violencia, en paz, en forma pacífica, porque estas marchas han sido y son, y serán pacíficas, de estas marchas no ha salido ni un acto de destrucción, aquí nadie se ha lanzado a quemar o a incendiar nada, han sido marchas pacíficas y siguen siendo marchas pacíficas, porque estas marchas lo que dan es la señal clara, de que nosotros sabemos que estamos librando una gran batalla y que cada marcha que se realiza de forma pacífica es una victoria en esta batalla y que la batalla que estamos librando no es para destruir, sino que es para construir, la batalla que estamos librando es para que en Nicaragua logremos vivir en paz todos los nicaragüenses”, reflexionó.
Caminatas por la paz y la alegría
Indicó que las caminatas continuarán para seguir promoviendo la paz en todo el país y desechar la violencia.
“Mejor librar la batalla con marchas que librarlas a balazos. No queremos muertes, no queremos dolor, queremos alegría y vamos a continuar librando esta batalla con estas marchas pacíficas dedicadas a la paz por Nicaragua, a la paz por la patria, a la paz por las familias”, puntualizó.