Con una mano adelante y otra atrás quedaron el señor Leoncio Teódulo Hernández Mendoza, de 65 años, y su esposa luego que su casa fue devorada por un incendio de donde fue el tanque rojo tres cuadras arriba y una al norte, en el barrio 30 de mayo, en el reparto Schick, en Managua.
A eso de las 10 de la noche me hice un café en un fogón que hice con tres piedras en el suelo. Luego me acosté a dormir y fue a eso de las 4:30 de la madrugada que me despertaron las llamas y el humo que me estaba asfixiando, por lo que salí a pedir ayuda, pero todo se quemó», dijo el señor Hernández.
Agregó que en ese momento estaba solo, ya que su cónyuge no estaba en la casa, y como él recicla productos plásticos para luego venderlos en una chatarrera, cree que alguna chispa del fogón originó el incendio.
Tras ver las llamas, los vecinos informaron a los bomberos quienes llegaron al lugar con 11 fuerzas y tres camiones cisterna que al mando del sub comandante Luis Solórzano controlaron la situación y evitaron que el fuego afectara las viviendas vecinas.