La cifra total de muertos a causa de Beryl subió a 15 tras el fallecimiento de cinco personas el lunes en Estados Unidos, donde entró como huracán, causando inundaciones y destrozos, pero se degradó a depresión tropical.
En Texas, cuyas costas Beryl golpeó la madrugada del lunes, dos personas fallecieron por la caída de árboles en sus viviendas, según informó Ed González, sheriff del condado de Harris, jurisdicción a donde pertenece la ciudad de Houston.
El alcalde de Houston, John Whitmire, reportó otras dos muertes: una tras un incendio que pudo ser ocasionado por un rayo y la de un miembro civil de la Policía de Houston que quedó atrapado en una inundación mientras iba a trabajar.
En tanto, en el área de Benton, Luisiana, una residente murió después de que un árbol cayera sobre su casa, producto del paso de la tormenta, dijo una autoridad local.
En su ruta por el Caribe la semana pasada el fenómeno ya había ocasionado otras 10 víctimas: tres en Granada, donde tocó tierra el lunes; dos en San Vicente y las Granadinas, tres en Venezuela y dos en Jamaica.