La luchadora estadounidense Ronda Rousey rompió el silencio y aseguró que está muy triste por haber perdido ante Holly Holm y asegura que su boca están tan golpeada que aún no puede comerse una manzana.
La legenda de la UFC declaró que sus dientes están inestables debido a los golpes que recibió en su boca. Cuando se le preguntó cuando volverá a pelear dijo pasarán tres a seis meses antes que pueda comer una manzana de nuevo.
Ronda tuvo que recibir atención médica tras finalizar su pelea donde además le tuvieron que reparar sus hermosos labios.