El abridor de Los Dodgers Walker Buehler y tres relevistas se combinaron para lograr el 23er juego sin hit en la historia de los Dodgers de Los Ángeles, que vencieron este viernes 4-0 a los Padres de San Diego, en el comienzo de una serie en la ciudad mexicana de Monterrey.
En México no se había realizado de manera oficial una serie de grandes ligas desde 1999, el partido se volvió histórico: el primer sin hit de las mayores registrado fuera de Estados Unidos y Canadá. «Fue asombroso», comentó Buehler (2-0). «Es una de esas cosas especiales, lanzar en un lugar como éste, en un ambiente como éste. Fue increíble».
Se trató del duodécimo juego sin imparable logrado por más de un lanzador en la historia de las Grandes Ligas. Buehler lanzó seis innings en su tercera apertura dentro de las mayores. El derecho novato recetó ocho ponches y dio tres boletos en su faena de 93 pitcheos, antes de ceder la lomita al zurdo Tony Cingrani, quien regaló un par de bases por bolas en el séptimo inning pero mantuvo intacto el sin hit.
El dominicano Yimi García ponchó a dos adversarios durante una labor perfecta en el octavo inning, y Adam Liberatore resolvió el noveno en tres hombres, ponchando al quisqueyano Franchy Cordero para alcanzar la proeza.
Esta vez, la decisión resultó mejor para Roberts. Éste fue el segundo juego sin hit registrado en la campaña. El zurdo Sean Manaea, de Oakland, logró el primero ante Boston, el 21 de abril.
Los Ángeles consiguieron la hazaña ante 21,536 espectadores en el Estadio de Béisbol Monterrey.