En Zimbabue, una pareja que disfrutaba de la noche en una piscina fue sorprendida por un cocodrilo que se lazó al agua y comenzó a perseguir a la mujer.
En ese momento el hombre salió rápidamente de la piscina y dejó a su pareja sola peleando con el animal. Felizmente la chica logra zafarse por un pelo y sale ilesa del aterrador apuro.