Un robot ruso se escapó el área de pruebas en la ciudad de Perm, cerca de los Urales, y logró alcanzar una concurrida calle asustando a las personas y perturbando el tráfico en la zona.
El robot estaba aprendiendo algoritmos de movimiento autónomo en el área de pruebas, los cuales iban a ser añadidos en la última versión del Promobot, según reveló uno de sus creadores Oleg Kivokurtsev.
Un ingeniero lo llevó al área de pruebas pero se olvidó de cerrar las puertas. Así que el robot se escapó y comenzó su pequeña aventura.
El personal se percató de su ausencia hasta 45 minutos después y cuando lo lograron alcanzar estaba en medio de varios ciudadanos y la policía con su batería muerta.