Una niña australiana padece la enfermedad de Addison, que acelera de manera sorprendente la maduración sexual en las mujeres.
Emily Dover, de Nueva Gales del Sur en Australia, tenía dos años cuando comenzó a desarrollar sus senos, su olor corporal y a sufrir de acné.
A los cuatro años Emily tuvo su primer período menstrual, actualmente ya tiene cinco años y está atravesando la menopausia.
La niña está experimentando los mismos síntomas debilitantes que normalmente afectan a las mujeres después de los 45 años.
Su madre informó para medios locales, que su hija nació como una bebé sana, pero que a la semana comenzó a crecer rápidamente y tenía problemas para dormir.
Tam Dover, madre de Emily, se siente frustrada porque su hija no ha tenido la oportunidad de ser una niña normal y feliz.
Su madre creó una página Go Fund Me para recaudar fondos para la costosa terapia de reemplazo hormonal que su hija necesita.
«Aquí estamos, con la esperanza de que usted pueda ayudar a hacer una diferencia en la vida de nuestra niña, para que puede sentirse como un niña normal de cinco años», escribió Tam en la página.
Médicos de la Unidad Pediátrica del Hospital de Wyong (Australia) estudiaron el caso de Emily y comprobaron que sus hormonas eran las de una mujer embarazada.