La tasa de suicidio en el país nipón se ha elevado durante la segunda ola de la pandemia, especialmente entre las mujeres.
Una japonesa de 30 años que contrajo el coronavirus se suicidó mientras se sometía a autoaislamiento en su casa de Tokio a principios de este, informa el medio local NHK.
A pesar de no tener síntomas graves, la mujer expresó su preocupación de que pudo haber transmitido la infección a sus prójimos. La fallecida vivía con su esposo y su hija, quienes también dieron positivo por la enfermedad.
«Es imperdonable que me haya convertido en una molestia», escribió en su nota de suicidio la mujer, quien se culpó a sí misma de que su hija se hubiera contagiado.