La ciudadana británica Joanne Hosking, de 41 años de edad, fue condenada a 18 semanas de prisión y le quitaron el derecho a tener una mascota de por vida por haberle lesionado la cadera a su perrita de la raza Jack Russell Terrier, de apenas 12 meses de edad, luego que ésta le derramó accidentalmente un café.
Los hechos ocurrieron en la localidad costera de Saint Ives, en el Reino Unido, y al principio la mujer juró hasta con los dedos de los pies que la perrita se había luxado la cadera luego de caerse desde una silla.
Lo que no contaba la señora es que uno de sus vecinos, cómo siempre muy amables y pendientes de todo, había grabado con su celular el preciso instante en que ella estrella a su perrita fuertemente contra el suelo, en dos ocasiones, y la golpea varias veces para luego llevarla dentro de su casa, sujetándola por el cuello.
Sin embargo tras un juicio, finalmente admitió que ella agredió a la indefensa perrita tras sufrir un ataque de ira durante el incidente que sucedió el pasado mes de julio del año 2017.
La perrita resultó con su cadera «zafada» y estuvo sufriendo mucho durante siete días hasta que su dueña finalmente se apiadó y la llevó a un veterinario que tuvo que someterla a una cirugía para repararle el hueso.
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https://youtu.be/9Bgdh04qm3U