Tragarse el semen de su pareja casi le cuesta la vida a una mujer de 31 años, quien nunca imaginó que practicar sexo oral la podía llevar hasta el hospital.
La infortunada fue trasladada de emergencia luego de presentar vomito, problemas para respirar y urticaria.
Luego de un análisis, los especialistas terminaron por descubrir que el hombre tuvo la culpa al ingerir horas antes del acto sexual pastillas ibuprofeno y augmentin para tratar una infección de oído que tenia.
Los medicamentos provocaron una fuerte alergia en la fémina, pero afortunadamente logró salvarse y vive para contarlo.