Chalise Smith, de 50 años de edad, es una mujer que ye tenía ocho hijos, y prestó su vientre para que su hija Kaitlyn Muñoz pudiera tener a su segundo hijo.
De esta manera, la abuela dio a luz a su propia nieta Alayna Kait, un milagro que toda la familia celebra.
La madre sustituta es oriunda de Pleasant Grove, Utah, Estados Unidos, en tanto su hija Kaitlyn, de 25 años, vive en Texas con su esposo Miguel Muñoz, de 30 años.
Durante la gestación de su primer hijo, la joven fue diagnosticada con una enfermedad que pondría en peligro su vida si quedaba embarazada de nuevo.
Los médicos dijeron que tenía endometriosis y síndrome de Sjögren, un trastorno autoinmune en el que su cuerpo ataca a las células sanas que producen saliva y lágrimas y puede afectar otros órganos como los riñones y el hígado,.
Kaitlyn siempre quiso tener una familia numerosa. Al contrario de su madre, tuvo problemas para embarazarse. Recurrió a la fertilización in vitro (FIV) para concebir a su pequeño Callahan hace dos años, quien debió nacer de forma prematura.
Chalise Smith decidió prestar su vientre para cumplir el sueño de su hija. «Le dije que entendía los riesgos y que había estado orando al respecto durante tres semanas.
A la abuela le fueron transferidos dos embriones congelados disponibles luego del ciclo de fertilización, y dos semanas después recibieron la noticia de que uno había pegado y que estaba embarazada del bebé.
“Mi mamá me ha dado a mí, a Miguel y a Callahan el regalo más significativo. Si bien no he tenido ni experimentado un segundo embarazo, me siento abrumada por la gratitud al ver a mi madre vivir el embarazo a los 50 años”.