Arthur Simonson, lanzó una línea de ropa interior hecha del papel con el que se envuelven los obsequios, que les permite a los amantes literalmente rasgarse la ropa mutuamente.
Entre las piezas de la colección, llama la atención una traviesa camisa de dormir que fue diseñada para que las parejas pueden condimentar su vida sexual desenvolviéndose el uno al otro en el dormitorio.