Un hombre de 66 años fue acusado de matar a otro a quien además, le arrancó los genitales, en Múnich, Alemania.
El sujeto engañaba a sus víctimas diciéndoles que era un doctor profesional entrenado.
Por razones de privacidad las autoridades no revelaron el nombre del acusado, quien afirmó que en un comienzo ofreció servicios sexuales a través de sitios web sadomasoquistas para poder ganar más dinero y salir de algunas deudas.
Tiempo después, el imputado amplió su abanico de habilidades y comenzó a realizar operaciones en la mesa de su cocina en Markt Schwaben, una ciudad bávara que se encuentra al este de Múnich.
Confesó que castró o amputó parcialmente las partes íntimas de ocho hombres entre julio de 2018 y marzo de 2020.
El sujeto se declaró inocente de la muerte de una de las víctimas que murió varios días después de que lo sometió al procedimiento quirúrgico improvisado.