El recepcionista que atajó con una mano a un bebé que el padre dejó caer

Leonardo Araújo estaba sentado frente a su computadora en un hospital de la ciudad de Teófilo Otoni, Brasil, cuando evitó la caída del niño.

El empresario Carlos Henrique apoyó a su hijo recién nacido sobre el mostrador del hospital. Estaba distraído y no se dio cuenta de que la cuna no estaba firme.

El grito fue fundamental para que Leonardo Araújo reaccionara con notable rapidez, atrapando al pequeño Enzo Henrique. El video se viralizó y él se convirtió en un héroe.

«Fue un susto muy grande. Al menos para los adultos, porque el bebé se quedó tranquilo. Me quedé preocupado por los padres, que quedaron en estado de shock», contó Araújo.

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